#MeToo y la idea de una película icónica
Escrito por Trion el 02/05/2018
Una industria como la cinematográfica hollywoodense se reinventa a sí misma como una especie de sistema regenerador de apologías en tanto las historias sean contadas. Luego entonces, la forma de contar la historia es lo que marca la diferencia.
Abrí Twitter para encontrarme con la noticia de Harvey Weinstein, publicada por el New York Times y la revista The New Yorker, en octubre del año pasado. Después del primer artículo, un cúmulo de declaraciones, opiniones, acusaciones, hashtags, memes poblaron los feeds de las tres redes sociales que más uso.

Algunos de los acusados por mujeres del movimiento #MeToo. Fuente: Chicago Tribune.
Claro que uno se forma una idea. Lees una nota, lees otra, quizás a las veinte ya no quieres demasiados detalles. Quizá cuando ya sobrepasan los cientos, empieza a darte algo de asco la realidad de una industria creada para entretenernos. Es decir, pensar que, mientras yo estoy platicando con la tele de fondo y está pasando Frida, Salma Hayek grabó su película soñada entre lágrimas y acosos.
A mediados de abril de este año se dieron a conocer los ganadores de los Premios Pulitzer. El NYT y la revista The New Yorker recibieron el considerado más prestigioso de estos reconocimientos: el de servicio público, por su cobertura del escándalo de acosos y abusos sexuales y maltratos hacia las mujeres y algunos hombres en la industria del entretenimiento, un parteaguas en la historia del periodismo posmoderno.

También la revista TIME reconoció a las mujeres que encabezaron la ruptura del silencio en el movimiento #MeToo nombrándolas Persona del Año en 2017. Fuente: TIME Magazine.
Hace unos días, me topé con la novedad de que dos casas productoras compraron los derechos al NYT para contar la historia del depredador sexual y exitoso productor de cine Harvey Weinstein. Plan B y Annapurna Pictures se encargarán de contar la historia de alguien que se dedicaba a contar historias a base de abusos, acosos, amenazas y manipulaciones, teniendo además grandes éxitos en taquilla y arrasando con Oscars y Emmys.
Me puse a pensar en cuál sería la forma en que se contaría la historia de este personaje. Cuál sería el enfoque que se le daría. Sería a partir de una película en específico, como ya se ha hecho antes, o un documental que repase la vida de Weinstein desde su infancia, o una serie de cortos de situaciones específicas como las que se contaron en los medios. Cuál sería el discurso y la orientación de la opinión. La fotografía. El lenguaje. Me resulta muy interesante ver el resultado de este trabajo creativo. Y, sobre todo, me parece pertinente el seguir alzando la voz de todas las formas en que nos sea humanamente posible.
Verónica Mastachi
Aura Oh. / 02/05/2018, (10:51 am)
Que tema tan fuerte. Me da gusto que no se esté quedando callada la humanidad ante este tipo de cosas. Pasa en las películas y pasa en la vida real.