¿Falta de apetito por estrés?
Escrito por Little el 29/09/2017
El estrés postraumático surge después de vivir eventos fuertes como guerras, accidentes, delitos o fenómenos naturales como los sismos.
Este trastorno puede alterar de diferente forma tu organismo. Una reacción común es la pérdida del apetito, que tiene su explicación científica en el cerebro, concretamente en el hipotálamo, que es la parte de nuestro que regula, entre otras cosas, el hambre.
La falta de apetito está directamente relacionada con la dopamina y la glucosa que van ligadas a estados graves de estrés y es cuando uno entra en un estado depresivo.
Los expertos recomiendan que lo primero a tratar debe ser la cuestión psicológica y poco a poco llevar una dieta ligera que no sobrecargue el estómago; con el tiempo encargarse que la dieta tome un rumbo saludable.
Alimentos ricos en magnesio resultan beneficiosos porque actúan como relajantes y mejoran tu estado y por lo tanto, es probable que empieces a comer. Nueces, almendras, espinaca, brócoli, cacao negro, aguacate y salmón son alimentos ricos en magnesio.
Por su parte, el plátano, pollo, atún y sardinas, contienen vitamina B6, cuya falta puede causar ansiedad, además te ayuda a la síntesis de la serotonina, que ayuda a mejorar el estado de ánimo; lo cual te ayudará para recuperar el apetito.
Hacer deporte, apoyarte en familiares, escuchar música, pasear pueden ser soluciones muy sencillas que se deberían poner en práctica para evitar la falta de apetito, estrés y ansiedad.